Señorita Lechuga
Desde que te conocí la noche ya no es mía
¿Cómo le hacen los enamorados para conciliar el sueño si tienen a su lado el producto de su deseo?
No estamos locas
Mis amigas, tan diferentes como parecidas: yo soy ellas
Me cuido de no “agarrarlo” a besos
Todos los días eran iguales hasta que llegaste tú