Cinismo político en apogeo
Cada vez son más las personas involucradas que –sin remordimiento alguno– son capaces de traicionar sus convicciones y sus valores.
Por Fátima Masse
Estamos en medio de un proceso electoral largo que culminará en junio de 2024. Conforme se perfila esta contienda observo que el cinismo político crece de forma descarada. Cada vez son más las personas involucradas que –sin remordimiento alguno– son capaces de traicionar sus convicciones y sus valores con tal de estar en los lugares en los que les conviene estar en este momento. Desafortunadamente, estas incoherencias deterioran la confianza en la clase política y erosionan lo que aún queda de democracia en este país.
Samuel García juró que no sería como “El Bronco”, pero no lo cumplió. A dos años de encabezar el gobierno estatal de Nuevo León, decidió abandonar el cargo para buscar la presidencia con Movimiento Ciudadano y el domingo arrancó su precampaña en Monterrey. No sólo traicionó la promesa que le hizo a la población de su estado, sino también ha generado inestabilidad política interna, porque quiere escoger a su sustituto y pasar por encima de la Constitución local, una “bravuconada autoritaria” como describe Carlos Bravo Regidor.
