Un tren llamado limbo

La toma de los 120 kilómetros de vías de Ferrosur por parte del gobierno federal no solo es poco clara desde el punto de vista legal, sino que costará tres veces más a la Marina continuar cada kilómetro de obra nueva.

Un tren llamado limbo
Bárbara Anderson
Por Bárbara Anderson

No, no es una expropiación. La toma del gobierno de los 120 kilómetros de vías de Ferrosur no fue expropiada, porque el estado no puede expropiar algo que es suyo: el trazado ferroviario es un bien de la Nación entregado en concesión a una empresa privada.

No, tampoco es un rescate. Esta figura aplica solamente cuando un concesionario incumple con sus obligaciones contractuales y el gobierno federal recupera ese activo. Ferromex no había caído en ninguna falta en su contrato y de hecho estaban en pleno de las negociaciones para el trabajo conjunto en el Tren Transístmico.