Sumar Nuestras Voces

Luego de iniciar los acompañamientos y vivir el testimonio del horror, pero sobre todo del dolor que las rastreadoras padecen, enfermé.

Sumar Nuestras Voces
Tania del Río
Por Tania del Río
audio-thumbnail
🎧 Audiocolumna
0:00
/6:39

Escribir el libro LAS RASTREADORAS, empezó como un grito que se sumó a los gritos de ellas. Casi sin pensarlo, como un acto desesperado. Soy observadora social y sentí un llamado a unirme a su lucha, a no dejarlas solas. El contexto en el que México se deforma me alarma mucho. El alto número de feminicidios que diariamente se cometen en nuestro país me enoja, pero también me entristece. Enterarme de la cantidad de fosas clandestinas que se estaban descubriendo en varios estados de la república causó en mí un sobresalto.

Empecé a estudiar de cerca el fenómeno de la desaparición forzada. Tan de cerca, que luego de iniciar los acompañamientos y vivir el testimonio del horror, pero sobre todo del dolor que ellas padecen, enfermé. Caí en cama y tuve que habilitar estrategias para continuar. He comprendido justamente en carne propia el tema de la DESOBEDIENCIA. Así nombré uno de los capítulos, cito:

“Ellas ponen sus cuerpos, reclaman al Estado la aparición de sus hijos e hijas, parejas, hermanos, familiares que faltan. Hacen maestría de acuerpamiento: juntas saben abrazar, consolar, desahogar, tranquilizar, animar… Ellas con toda su extensión física despliegan su humanidad en las marchas y manifestaciones para pedir justicia, en las jornadas de búsqueda, en las reuniones con autoridades y legisladores, fiscales y militares; en lugares de alta peligrosidad se arriesgan al encuentro con huachicoleros, zetas, narcos y toda la variedad del crimen organizado. Ellas habitan con sus cuerpos en la primera línea del activismo de derechos humanos contra la desaparición forzada, se suman a las protestas contra el feminicidio, el homicidio, pero sobre todo contra las arbitrariedades del Estado.

La maternidad se convierte en desobediencia cuando el sistema pretende que ellas olviden las memorias de su vientre. ¿Cómo quedarse impávidas ante un ataque monstruoso de maldad? Es el valor de esa memoria un valor ético. Es esa memoria la única relación que empuja a las mujeres a accionar formas de afrontamiento. Es su aflicción grupal que supera el curso natural de una pérdida lo que les aviva a través de mecanismos de rastreo, exploración y búsqueda.

Me volví bien perra para buscar… por eso siempre voy al frente en las búsquedas.

-Testimonio de Rastreadora- (cierro cita)”

En un país donde impera la impunidad no se puede ser obediente, ni bien portada. En un país en el que se trata tan mal a las mujeres, no se valora su trabajo doméstico, ni la administración y cuidados del hogar y la familia, ni su aportación al PIB ni lo demás.  No. No se puede ser débil, ni sumisa, ni dócil, ni mansa.  

Las Rastreadoras cuenta historias verídicas en las que madres, hermanas, esposas salen a buscar a los suyos. Y aunque hay miles de historias que viven las familias víctimas de desaparición, yo apenas cuento unas pocas. Entre mis conclusiones encuentro que los cuerpos de las víctimas de desaparición forzada, que se han encontrado, evidencian máximas violencias y un poder que nos acecha a todos. La desaparición pretende borrar la historia y existencia de esas personas, pero también el cúmulo de violencias que sufrieron. Pretende volverles invisibles. Y al no haber castigo, se reproduce y se reproduce. Por eso México no ha podido detener este fenómeno. Necesitamos reinventarnos, reconstruirnos, pero sobre todo unirnos en comunidad.

Este libro me ha permitido dar voz a ellas y también compartir cierta magia inesperada.

Esto sucedió en la presentación de mi libro en Mazatlán:

Eran las 5:15 de la tarde y se sentía un calor agobiante, hasta yo me sorprendí de tantos asistentes a pesar del clima. Nos subimos al escenario y mientras pasaban las formalidades, un aire fresco nos llegó, hasta tumbó al suelo los libros de la mesita del centro. La Dra. María Teresa Guerra Ochoa se levantó a recogerlos, también yo y los acomodé. Apenas empezamos el evento, un colibrí salió de la nada y sobrevoló frente a nosotras tan cerca encima del ramo de rosas rosas por varios segundos, Janet Yepez Vocera del Colectivo Tesoros perdidos. Hasta encontrarlos se conmovió tanto al verlo que no pudo evitarlo y su alma dejó escapar un sollozo, sus lágrimas salieron abundantes y casi se derrumba. Yo junto a ella aprecié el mágico instante con alegría ¡Ella y yo nos miramos y dijo “Viene a darme fuerzas”! Yo la abracé como pude para darle contención. La Dra. Guerra notó que algo pasaba y hasta hizo una pausa en su discurso.

Janet se recompuso y continuamos. Cuando tomó la palabra dijo que justo ese día su hijo Jesús Ernesto cumplió 6 años de desaparecido.

Horas más tarde, mi amigo el arqueólogo Joel Santos me mandó mensaje: Tal vez a la mamá que estuvo contigo le interesará saber que, según la mitología azteca, los guerreros muertos en batalla, se iban al cielo a seguir a Huitzilopochtli, solo ellos y las mujeres que morían en parto tenían ese derecho. Pero sus almas podían regresar a la tierra en forma de colibríes, de hecho, Huitzilopochtli, el dios principal de los mexicas, quiere decir “colibrí izquierdo”.

Compartí esto con Janet diciéndole que el Universo tiene maravillosas formas de comunicarse: ¡Tu hijo está en la Luz!

Ella respondió que ese gesto le dio aliento, fe y mucha fortaleza.

*Tania Del Río, autora del libro Las Rastreadoras, es licenciada en Sociología, egresada de la Universidad Autónoma de Sinaloa; diplomada en Género y políticas públicas por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales y el Instituto Nacional de las Mujeres; especializada en Sexualidad humanista por el Instituto OIKOS de Juan Carlos Hernández Meijueiro; diplomada en Explotación sexual, comercial, infantil, con enfoque en derechos humanos y perspectiva de género, por el Instituto Politécnico Nacional; capacitada por la Suprema Corte de Justicia De la Nación, la oficina en México del Fondo de las Naciones para la Infancia y la oficina de Defensoría de Derechos de la Infancia A.C. en Psicología forense especializada en niñas, niños y adolescentes. Colaboró varios años en Televisión Azteca en el programa Hola Culiacán, con temas de salud sexual y en la revista política CRUCIAL. Actualmente es investigadora y capacitadora en temas de equidad de género, violencias, discriminación y sexualidad.
Es locutora y productora de contenido en Radio Sinaloa desde hace más de 16 años.
✍🏻
@taniadelrio_

Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.


Más de 150 opiniones a través de 100 columnistas te esperan por menos de un libro al mes.