Día Internacional de lucha contra el ruido

Todos los días parecen sumarse nuevos sonidos a este continuo que invade cada espacio de nuestra vida cotidiana.

Día Internacional de lucha contra el ruido
Jimena de Gortari
Por Jimena de Gortari

El ruido parece no terminar nunca. Estando en la calle el ruido del tráfico, de los aparatos de música, del perifoneo que pasa a todas horas y al ir entrando la tarde, el de los establecimientos mercantiles, los cláxones del tráfico de la hora pico, los aviones ... Imagino que quienes leen podrán incorporar distintas fuentes sonoras. A todo esto, se suma el ruido que padecemos en el interior de nuestras viviendas: el de las obras, las fiestas del vecino, los perros que pasan horas encerrados, la televisión, la licuadora, la radio, por mencionar algunas otras fuentes.

Todos los  días parecen sumarse nuevos sonidos a este continuo que invade cada espacio de nuestra vida cotidiana. Nada se modifica pese a las noticias sobre lo perjudicial que es para la salud, los avisos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) o los foros académicos. La ciudadanía parecería también ser consciente del daño que genera este contaminante solamente con saber que no podrá descansar, trabajar o concentrarse cuando frente a su casa la Secretaría de Obras está reencarpeteando o cuando nota que llegó la fecha de la fiesta patronal del barrio o cuando aparece en el patio la persona con la sopladora de hojas.