Una responsabilidad compartida

Ahora la inscripción a la seguridad social de las personas trabajadoras del hogar será obligatoria.

Una responsabilidad compartida
Marcelina Bautista
Por Marcelina Bautista
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Ahora la inscripción a la seguridad social de las personas trabajadoras del hogar será obligatoria. En meses pasados la Cámara de Diputados aprobó, con 486 votos a favor y una abstención, la reforma a la Ley del Seguro Social que da paso para que nuestras compañeras dignifiquen su trabajo, su vida y su salud y se integren a la economía formal.

Este es un triunfo sin precedentes para las trabajadoras del hogar y que comenzó en 2016 con la demanda de María Rosario Garduño Gómez contra sus empleadoras, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT). Por lo que el 5 de diciembre de 2018, la SCJN “consideró que era inconstitucional que los patrones no estuvieran obligados a inscribir a las empleadas del Hogar ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)”, y le pide al IMSS la creación de un programa piloto de incorporación y a los legisladores la reforma de la ley.

Seis años después del amparo de Garduño Gómez, por fin se da cumplimiento a la sentencia para reconocer el derecho a la seguridad social obligatoria para más de 2.3 millones de personas trabajadoras del hogar.

Por ello el movimiento de trabajadoras del hogar seguirá empujando porque este derecho se cumpla en los hechos y no quede solo en papel.

Ahora, el IMSS a partir de abril estará publicando la reforma para tener todo en orden y abrirnos las puertas a los cinco seguros: por riesgos de trabajo; enfermedades; maternidad y guarderías; invalidez y vida; retiro, cesantía en edad avanzada y vejez. Estamos hablando de que para este mes de abril, todas las personas que contratan las labores de una o más personas trabajadoras del hogar deberán inscribirlas al IMSS, cumplir con sus obligaciones y en caso de no hacerlo atenerse a sanciones y multas indicadas en el Reglamento para la imposición de multas por infracción a las disposiciones de LSS y sus reglamentos.

Desde el Centro Nacional para la Capacitación Profesional y Liderazgo de las Empleadas del Hogar (CACEH), el cual fundé y dirijo desde hace 22 años, creemos que esta es una oportunidad invaluable para una transformación sin precedentes en el mundo del trabajo del hogar, y es un reto que tenemos que tomar tanto las personas trabajadoras del hogar como empleadoras. Porque la obligatoriedad la hacemos todos.

La SCJN señaló que la Ley del Seguro Social era inconstitucional y discriminatoria, pero esta ley es solo un reflejo de la sociedad en la que vivimos. Durante los tres años que lleva operando el programa piloto de incorporación, sólo 52 mil 70 personas trabajadoras del hogar ingresaron al IMSS. Por eso tenemos la consigna que repetimos a nuestras representadas: sacúdanse el miedo.

Cómo trabajadoras del hogar tenemos que informarnos sobre nuestros derechos, concientizarnos sobre la importancia de tener seguridad social y planear nuestro futuro; pedir a nuestros empleadores la incorporación y si esto no sucede, reportarlo al IMSS.

Cómo personas empleadoras, no hay que esperar a las inspecciones, ni siquiera hay que ir a una ventanilla física, porque el trámite es sencillo y accesible en línea. Es necesario que hablen sobre derechos y obligaciones con las personas que laboran en su hogar y formalicen su relación. Necesitamos que sean protagonistas en este proceso de formalización.

Juntas, personas empleadoras, trabajadoras del hogar, tenemos que incidir en el IMSS para que mejore sus servicios, el acceso a la atención médica, a las guarderías… nuestras aportaciones económicas, pero también un activismo como derechohabientes nos debe llevar a la rehabilitación del instituto, y saldar una deuda histórica hacía una responsabilidad compartida.

Lo que sigue, la mejora de salarios y el acceso a las personas trabajadoras del hogar al INFONAVIT, porque hay instituciones del Estado mexicano que siguen contemplándonos dentro de regímenes especiales o simplemente ignorándonos. Por fortuna y gracias a la organización y lucha, el IMSS deja de estar en esta lista.

Aquí te presento el tabulador de salarios 2023, una experiencia de las trabajadoras del hogar

El aumento a un salario mínimo profesional y 12 días de vacaciones pagadas con el que empezamos 2023 también es aplicable para las personas trabajadoras del hogar.

Con esto se va garantizando un trabajo digno para las trabajadoras del hogar también en México.

Porque también entró en vigor el aumento a los días de vacaciones a los que tiene derecho por ley una persona trabajadora que, pasaron de seis días al primer año de trabajo a 12 días obligatorios de vacaciones dignas.

@MarceBautistaB

Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.


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