Document
Por Mariana Achirica* 

Cuando hablamos de la urgencia climática, solemos pensar en compromisos globales como el Acuerdo de París o en metas de reducción de emisiones a 2030. Sin embargo, detrás de esas cifras están los instrumentos que hacen posible avanzar hacia una economía baja en carbono. Uno de ellos —todavía incipiente en México— es el mercado de carbono.

Para decirlo en palabras simples: los mercados de carbono permiten a gobiernos, empresas e incluso individuos comprar y vender créditos que representan la reducción o eliminación de gases de efecto invernadero en la atmósfera. Estos créditos se generan a través de acciones como la conservación de bosques, la captura de metano en vertederos o la transición hacia energías renovables.

SUSCRÍBETE PARA LEER LA COLUMNA COMPLETA...

Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.