Por Marilú Acosta 
audio-thumbnail
Audiocolumna
0:00
/308.232

Jesús Estuardo Luján Irastorza se ha tragado una cucharada de su propia medicina. Reacio a nacer ante la justicia, en verano de 2024 sale de la Ciudad de México para evitar ser arrestado, primero va a California y luego a Texas. El 20 de diciembre de 2024 se reactiva la orden de arresto por práctica indebida del servicio médico en grado de tentativa. En marzo de 2025, la fiscalía de la CDMX solicitó a la Interpol emitiera una ficha roja contra Luján y a la FGR iniciar los trámites de extradición. Así fue como se enteró EUA que Luján era el ejemplo perfecto de mexicano con visa que tanto quiere expulsar el presidente norteamericano: el delincuente; entonces le revocaron su visa en junio 2025.

El tan temido y no siempre malo ICE (Immigration and Customs Enforcement), lo tiene hospitalizado desde el 10 de octubre de 2025 en el centro Otay Mesa, de San Diego, en donde ha recibido su tesito para consentirlo. Ese tesito inductor, que tan amablemente y a traición, Luján le daba a sus clientas. Sus dolores de parto comenzaron una semana después: el 17 de octubre un juez decidió su deportación. Lo primero que se le ocurre a Luján es pedir asilo; el sistema gringo le concede una revisión por el llamado miedo creíble. Lo que es ser hombre de tez clara, no dudaron en creerle, mientras que la voz de las mujeres abusadas por Luján se convirtieron en datos excluidos.

Desde el 11 de diciembre 2025, a las 8:56hrs; EUA y México son papás de un prófugo de la justicia que ha llegado a manos de la fiscalía inducido por ICE. Nació bajo el signo de Sagitario, con ascendente en Capricornio, un medio cielo en Escorpio y su luna en Géminis. La bóveda celeste confirma que esta detención no es un incidente menor, sino un momento de reestructuración forzosa y el fin de un ciclo de impunidad. Se intensifica la discusión moral y social entre la opinión pública (Luna) y la ley (Sol). Marte en Tauro demuestra que la acción de la autoridad es firme, calculada y no se puede detener. Este delincuente nacido ante la justicia, lo hace en un momento en que la verdad legal (Sagitario) confronta la sombra y la herida colectiva (Escorpio/Quirón).

Este bebé sale del hospital vistiendo sudadera y filipina de enfermería azul marino, pantalón gris/blanco y sandalias tipo crocs negros. En su pañalera trae 13 denuncias por práctica indebida del servicio médico, revelación de secretos, fraude procesal y delito previsto en la ley de amparo de la FGR. La fórmula del biberón, que no ha parado de mamar, se conoce como táctica DARVO (Deny, Attack, and Reverse Victim and Offender), y lo alimenta como la víctima de un feminismo radical. Además de su acta de detención, trae el pedigrí que lo certifica como médico-chamán-elegido por la comunidad Seri en Punta Chueca, Sonora. Y como antecedentes heredofamiliares el hospital en donde estandarizó el abuso a las mujeres y sus familiares, llamado Bité (vida en rarámuri).

Este delincuente recién detenido por inducción, no quiso ejercer la medicina, ni ser chamán; lo que buscó fue validar su ego y formar una secta de admiradoras que fomentaban la consolidación de superioridad espiritual. México, una ciudad que queda a más de mil kilómetros de distancia de los Seri, es tierra fértil para la narrativa espiritual de haber tomado enseñanzas de los Seris y aplicarlas a la medicina, para luego vender una marca Rarámuri. Para Luján, la sabiduría indígena nunca fue raíz, es branding.

En una reflexión sobre lo sucedido, en ningún momento lamenta el daño causado, de lo que se arrepiente es de no haber sido más selectivo con sus clientas, para así evitarse problemas legales. Para Luján, su mala praxis jamás ha sido el problema, sino la voz de sus clientas. Su prestigio no se construyó en la excelencia médica o en la mística chamánica, sino en la selección de clientas y personal de salud que no cuestionaran sus métodos violentos, sus pobres conocimientos o su desprecio velado a la mujer, una misoginia ninja en su máxima expresión. Para cualquier investigador honesto, un dato anómalo es una oportunidad de aprendizaje, no para Luján; para él, una cliente con criterio es un dato sucio que arruina su producto.

El colectivo Con Ovarios, representa los datos excluidos que no pudo esconder. Este nacimiento inducido es un hito para la medicina, un gremio que tiene como mantra: si yo tuve que aguantar lo inhumano para ser doctor, tú (paciente/clienta) tienes que aguantar lo inhumano de mi práctica médica. Con un éxito cosmético y no estadístico, como científico fraudulento Luján intentó borrar a las mujeres que no encajaban en su narrativa de salvador. Con esta detención estamos ante la caída de un falso chamán, de un médico fraudulento, de un delincuente que pagó $3,500 pesos de fianza para seguir su proceso en libertad y largarse del país. Esto le comprueba a la sociedad las consecuencias de continuar aceptando la enseñanza médica y el ejercicio médico con tanta violencia. Que este sea un paso firme e inapelable que alumbre la podredumbre que existe en la industria de la salud, con abusadores(as) disfrazados de salvadores(as).

✍🏻
@Marilu_Acosta

Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.


Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.