Por Marilú Acosta
Ambición es una palabra con una historia interesante. De origen latino: el verbo ambire significa abarcar, ir alrededor, por uno y otro lado. Ambitio, ambitionis es la acción de rodear o merodear tal como se hace al acechar a una presa. Esta palabra rápidamente pasa del ámbito de la cacería a la política para describir el ajetreo y alboroto de los y las candidatas al solicitar votos por un lado y por otro. Ambición es hacer campaña política. Con el paso del tiempo la palabra amplía su significado, sale de la política y se convierte en un acto general, así es como ambición se entiende como ir por un lado y por otro con el deseo de obtener algo. Desde una extraña ideología en la que tener deseo y poseer algo se considera malo, el juicio de valor negativo le da a la ambición una connotación no aceptable.