Zaldívar, ¿confesión tardía o mensaje al futuro?

Más que una revelación, las recientes declaraciones del ministro Arturo Zaldívar son una confirmación de que Felipe Calderón intervino en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para evitar que a él y a sus allegados se les señalara responsabilidades por el incendio de la Guardería ABC, que dejó 49 niños muertos y un centenar de heridos.

La operación de Fernando Gómez Mont desde la Secretaría de Gobernación para influir en la decisión de los ministros se consignó en su momento en espacios periodísticos, cosa que también hicieron Juan Molinar, Daniel Karam y Eduardo Bours.

Incluso, días después del fallo, Gómez Mont admitió su visita a la Corte: “No fuimos a defender a nadie, sólo fuimos a pedir que se aplicaran reglas razonables que permitan a los servidores públicos determinar dónde están sus deberes y dónde no” (aquí la videonota https://bit.ly/3t1vl98).

Más que para proteger a Marcia Gómez del Campo, pariente lejana de Margarita Zavala y una de las dueñas de la guardería, la intervención de Calderón fue por Molinar y Karam, ex directores del IMSS y dentro de su círculo cercano.

En su libro La guerra de Los Zetas (Debolsilo, 2012), el periodista Diego Osorno documenta que Gómez Mont advertía a los ministros que aprobar el proyecto para responsabilizar a funcionarios de alto nivel por omisiones sentaría un precedente que podría permitir enjuiciar a Calderón por otros asuntos, como la muerte de civiles durante operativos militares.

Zaldívar también se refirió a los obstáculos que puso el IMSS para el traslado de menores quemados a los Hospitales Shriners de California, expertos en el manejo de este tipo de emergencias, pues los querían concentrar en la Unidad de Quemados del Centro Médico Nacional de Occidente, en Jalisco.

Alberto Barreda Robinson (+), representante de Shriners en Sonora, acompañó a las familias afectadas en esto y logró que Eduardo Bours, como gobernador, interviniera para que los padres de los menores decidieran dónde serían atendidos sus hijos.

Aunque Margarita Zavala lo niegue hoy, todo eso está plenamente documentado en notas publicadas en distintos medios de comunicación de aquel momento, además del testimonio de los padres y madres de las víctimas.

Ella estableció un contacto con las familias y gestionó algunas cosas, es cierto, pero también lo es la pésima actuación del IMSS en el manejo inicial de los heridos por querer sostener la narrativa de que estaban en control de la situación.

¿Por qué hablar ahora?

En casos de alto impacto como el de la Guardería ABC, el tiempo permite a actores clave involucrados estar en una mejor posición para contar su versión.

Arturo Zaldívar tenía pocos meses de haber llegado a la SCJN, propuesto por Calderón, cuando la investigación le fue turnada. Después de 12 años es el presidente de la Corte, mientras que Felipe Calderón ya no tiene el poder del Estado y el juicio de la historia no le ha sido nada favorable.

Por eso, aunque no revele nada, el testimonio de Zaldívar es importante por dos cosas: contribuye a construir la memoria histórica de uno de los hechos más dolorosos que se han registrado en México, resultado de la corrupción.

Además, deja constancia de hasta dónde se ha llegado a violar el Estado de derecho en el país, en el que un presidente le quiso dar órdenes a un ministro y cobrarle el “favor” de haberlo propuesto para el cargo.

La confirmación de Arturo Zaldívar es tardía o muy oportuna, según se le vea.

Puede parecer tardía si la vemos en retrospectiva respecto a un caso que ya quedó cerrado en la SCJN (que no en el proceso jurídico).

Puede parecer oportuna si la vemos como un mensaje para quienes quieran seguir considerando a la SCJN como una extensión del gabinete.

Juzgue usted.

@lojesa

Lourdes Encinas es periodista con 20 años de experiencia, especializada en investigación y análisis. Maestra en Gobierno y Asuntos Públicos por El Colegio de Sonora. Autora del libro 49 razones para no olvidar, una investigación sobre el caso de la Guardería ABC.

Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.

Más de 100 opiniones a través de 80 columnistas te esperan por menos de un libro al mes. Suscríbete y sé parte de Opinión 51.