Seguidores, más seguidores, más seguidores… ¿y la calidad apá?

Total que entre bikinis, músculos, bailes y víctimas, hemos creado falsos protagonistas, intercambiándolos por la calidad y dejando ir la oportunidad de ser provocados emocionalmente.

Seguidores, más seguidores, más seguidores… ¿y la calidad apá?