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Por Pamela Cerdeira

Estábamos en el marco de las elecciones del 2018, acababa de terminar un test en Facebook al que le había dedicado varios minutos solo para descubrir “Qué pizza era”, y me sorprendía la cantidad de tiempo que le había dedicado a algo tan irrelevante, pero la incógnita sobre la respuesta era suficientemente atractiva como para quererlo descubrir.

¿Qué pasaría si un test podía decirme sin los sesgos propios de las filias y las fobias, qué candidato era? Así fue el nacimiento de Voto Ciego, un portal para que la gente pueda votar por las propuesta de las candidatas y el candidato a la presidencia, sin saber a quién pertenece cada propuesta. Y al final conocer a quién le dieron más votos. La primera vez que hice el ejercicio, 200 mil personas contestaron el cuestionario hasta el final, la segunda ocasión fue para las elecciones del Estado de México y la tercera en esta elección presidencial. El ejercicio fue llevado a cabo en la primera ocasión en colaboración con Gerardo Saucedo y dos estudiantes de la Universidad Iberoamericana y en la segunda y esta tercera ocasión ha sido financiado con recursos propios.

Estaré presentando algunos resultados del ejercicio de aquí al 2 de junio y esta es la primera entrega.

Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.