Por Rosa Covarrubias
Dicen que lo que mal comienza, mal termina. En el futbol, esa regla no es la excepción.
Diego Cocca se quedó como “el perro de las dos tortas” luego de dejar a Tigres en febrero de 2023, equipo que había buscado sus servicios para el torneo Clausura, para emprender una aventura en la llamada Selección Mexicana.
Es cierto que era una oportunidad única, pero parece que Cocca fue demasiado inocente para creer que llegaría hasta el Mundial de 2026 al frente del Tricolor y más aún, cuando se notaba a una mayoría de dueños inconformes por la manera en la que lo eligieron para el puesto.