#TestimoniosRefugiadas8M: Las grietas también fortalecen

Hoy te cuento mi historia.

Había una vez una chica que tenía 17 años;  buscaba amor y paz, pero claro no la encontró.

Un día encontró a una persona que se hacía pasar por un buen chico, se juntó con él. Cuando empezaron su vida de pareja todo fue diferente: él empezó con un empujón y gritos, le decía que era inútil, fea, gorda, que era una buena para nada, luego vinieron los golpes, cachetadas, amenazas, jalones de pelo…pero esa chica no hacía nada, aunque pudiera, para alejarse de él;  no importaba si la dejaba golpeada.

Insultos y más insultos también recibía de su suegra. Pasaron los días, las semanas, los años y la chica se sentía inútil, pequeña ante él.

Llegó el día cuando ella se armó de valor y dijo: hasta aquí y puso un alto. Salió de la casa, corrió entre las calles con ese miedo de que la encontraran.

Su tía le ayudó bien y le dijo que había un refugio. Y es allí donde su vida le dio un giro por completo, personas profesionales le ayudaron y  le dieron atención psicológica.

La trasladan a otro lugar por seguridad de ella y de su hijo. El día que todo cambió llegó.

Ahora es una mujer fuerte, segura de sí misma, se siente libre y valiente como el águila, fuerte como una roca…sí,  ahora soy una águila y  nadie me podrá detener.

Ahora es tiempo,  te animo a que tú también digas “no más violencia”.

Las grietas también fortalecen, así que no te preocupes si hoy estás un poco rota, mañana serás un jardín hermoso.

O. Y. S. H.

Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.

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