Así nos volvimos cuadrado Hicimos lo único que se puede hacer en esos casos, echarnos un par de tequilas mientras escribíamos una lista.
No me digas pobrecita No me digas pobrecita; no me tengas lástima, tampoco digas que soy una guerrera… solo soy una madre que ama a su hija y que ser fuerte fue su única opción.
Un laberinto de esperanza y desesperación Los segundos se convierten en horas y cada tic-tac resuena como un recordatorio de la bolita que descubrí apenas hace una semana.
“Al amor hay que sostenerlo, pero también dejarlo ir” Nadie puede definir con exactitud cuándo es el momento de terminar una relación. Simplemente el cuerpo nos lo comunica.
Se nos fue un artista Su partida me deja una lección más, una que me confronta y me invita a reflexionar.
Tocarnos y tocar a otros ¿Quién no ha sido capaz de sentir el amor, la pasión, la urgencia y hasta el deseo con el roce de un tacto ajeno?